Mike Tyson -apodado en su mejor época “el hombre más malo del planeta”- vestido con un traje blanco arriba de un escenario y con la música de Nat King Cole (Nature Boy) de fondo causa expectación. Así comienza el monólogo que estrenó Home Box Office (HBO) en 2013 titulado: Mike Tyson Undisputed Truth -verdad indiscutida, en español-. La presentación de casi hora y media de duración tiene situaciones que la convierten en una experiencia que no pierde vigencia con casi una década de antigüedad.
Spike Lee es el hombre que dirigió el programa grabado en el Imperial Theater de Nueva York. Lee no pasa desapercibido en la industria del cine y la televisión. La mayoría de sus películas abordan temas enfocados a los derechos y abusos de las personas de raza negra. Ganador de un premio Óscar por mejor guión adaptado, es un apasionado de los deportes. Es común verlo a nivel de cancha cuando juegan los New York Knicks en el Madison Square Garden; esto avalado por la National Basketball League (NBA). Una costumbre que hizo tendencia, en la industria cinematográfica, el legendario Jack Nicholson con Los Ángeles Lakers.
La popularidad de Tyson hace que millones de personas lo ubiquen por situaciones contrastantes. El campeón mundial de boxeo peso completo más joven de la historia, quitarle un pedazo de oreja a Evander Holyfield tras una mordedura y hacer un cameo en una de las películas de comedia más exitosas de los últimos años: The Hangover (Todd Phillips, 2009). El grado de popularidad que obtuvo entre los años ochenta y noventa derivó en que guionistas de la serie “Los Simpson” crearan una parodia de Tyson con todos los elementos mencionados llamado Drederick Tatum.
Tyson deja a un lado la imagen de tipo duro y muestra que horas de entrenamiento actoral funcionan para que un sujeto con una dicción deficiente mantenga a la audiencia entretenida. Mike cuenta su vida en forma cronológica. La relación de sus padres ayuda a comprender lo disfuncional de la familia Tyson en la infancia de Mike. Vivir en una zona de alta marginación social lo llevó a ser un delincuente juvenil; era cuestión de tiempo para que lo arrestaran. “Al estar detenidos, nos daban techo y tres comidas al día. Eso era mejor de lo que teníamos en casa” dice el boxeador con una mezcla de ironía y crudeza de la forma en que vivió esos momentos. Ahí, el entrenador de boxeo Cus D´Amato descubrió las cualidades del muchacho. Le prometió desde que se conocieron que lo haría campeón mundial, una predicción que se logró al poco tiempo.
Para darle dinamismo al evento -sumado a breves pausas para recuperar el aliento del protagonista- , pantallas en distintos puntos del escenario muestran fotos y videos de algunos de los hechos que narra Mike. La relación con el promotor Don King se menciona en distintos puntos. Aunque varias de las vivencias son conocidas, existen algunas novedades para el aficionado más ferviente a “Iron Mike”. El deseo por una mujer hizo que casi combatiera con un joven Brad Pitt. Adoptar la religión del Islam le dio la serenidad suficiente para dejar atrás los vicios que lo llevaron a momentos de crisis. Otros deportistas legendarios como Kareem Abdul-Jabbar y Muhammad Ali también encontraron respuestas en esas doctrina.
Mike Tyson Undisputed Truth puede verse en la plataforma de HBO Max. Recién el nombre de Tyson dió tema de conversación por su respuesta al ser agredido durante un viaje en avión. Con estabilidad en su vida y libre de adicciones, Mike amenaza con regresar al boxeo profesional si le llega la oferta idónea. Las leyendas del deporte cuentan con varios claroscuros en su trayectoria profesional. Mike Tyson sabe que ha cometido varios errores, aprendió a vivir con las consecuencias de sus actos. Eso lo hace quedar como un sujeto honesto en comparación a otros que nada más fingen arrepentimiento.
Periodista formado en la teoría y práctica. Disfruta desde un evento de lucha libre en la calle hasta un partido de Champions.
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