Un mundo decadente y repleto de tecnología es un escenario recurrente en las animaciones japonesas. Algunos clásicos con estas condiciones son Akira (Katsuhiro Otomo, 1988), Ghost in the Shell (Mamoru Oshii, 1995) y Cowboy Bebop (1998) . Crear contenidos nuevos cuando parece que las ideas se han agotado no es sencillo; basta con cambiar algunas premisas para formar una propuesta atractiva. En 2018, una nueva animación obtuvo comentarios favorables: Megalo Box. Al seguir con las referencias a clásicos, puede calificarse como el resultado de mezclar tres éxitos cinematográficos: Rocky (John Avildsen, 1976), Real Steel (Shawn Levy, 2011) y Mad Max (George Miller, 1979).
Junk Dog -puede traducirse como “perro de basurero”- participa en combates clandestinos donde acepta perder con tal de llevarse una bolsa mayor a causa de las apuestas. Las reglas del combate son como las del boxeo: uso de guantes, asaltos de tres minutos y nocaut/nocaut técnico como opciones de triunfo. Sobresale que los participantes usan máquinas adaptadas a sus cuerpos; una especie de prótesis mecánicas adaptadas a los brazos que incrementan la fuerza y velocidad de los golpes. Luego de participar en una pelea arreglada; Junk se entera de un torneo donde los mejores exponentes del Megalo Box -como se denomina este híbrido de boxeo y tecnología- mundial participarán: Megalonia. Producto de la casualidad, conoce a Yuri, el favorito a ganar el torneo.
Mientras se prepara para un combate más, Junk queda sorprendido ante la llegada de Yuri. El afamado campeón del Megalo Box decide acudir a los bajos mundos para saldar cuentas luego de un tenso intercambio de palabras. Junk es derrotado; eso no lo intimida. Más allá de la tecnología óptima de Yuri; Junk nota que su rival tiene fallas técnicas que lo hacen endeble. Herido en su orgullo, Junk le pide apoyo a su entrenador, Nanbu, para que lo inscriba en Megalonia. Sin dinero para un equipo de pelea nuevo -llamado gear-, acepta un par de peleas disparejas sin apoyo tecnológico.
Joe -nombre que adopta Junk al generar una nueva identidad- adquiere fama por exponerse a pelear sin el apoyo de una máquina eficiente. Los trece episodios de la primera temporada, con una duración de veinticinco minutos cada uno, están disponibles en HBO Max. Poco a poco se conocen las historias personales de los personajes principales; la música de fondo da un realce a las escenas y no se pierde la atención a la historia mientras avanzan los episodios.
Sin caer en temas técnicos complejos, se habla de los puntos esenciales que necesita cualquier sujeto para ser exitoso en el boxeo: buena condición física, combinaciones de golpes, inteligencia para analizar las cualidades del oponente y velocidad para atacar/defenderse durante el encuentro. Lecciones amenas de boxeo, con el clásico toque de la animación japonesa, no se encuentran con facilidad.
Periodista formado en la teoría y práctica. Disfruta desde un evento de lucha libre en la calle hasta un partido de Champions.
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