En vísperas en la época donde algunas criaturas de la mitología del terror están en su apogeo, resaltan los hombres lobos, aquellos que, durante la luna llena, encuentran su punto más potente para su transformación en aquellos temibles seres.
Ese efecto está realzando el momento de Raúl Jiménez el “Lobo de Tepeji”, que después de un largo tiempo post lesión, mismo que le costó y mucho volver a tener regularidad, actualmente goza de su mejor forma desde aquella fatídica lesión, que casi le cuesta su carrera como futbolista profesional.
Punto de inflexión
A finales del 2020, la carrera de Raúl sufrió un duro momento, pues una fuerte lesión en su cabeza puso en peligro su carrera e integridad, ese rocoso choque ante el defensor del Arsenal David Luiz le costó quedar fuera de circulación, pese al gran momento que vivía en el Wolverhampton, donde era el hombre gol y figura del equipo inglés.
Entre la incertidumbre que había sobre si podría volver a jugar fútbol o en cuanto tiempo estaría de vuelta, la recuperación fue lenta, de forma paulatina, considerándola como un milagro, pero por fortuna, Jiménez pudo seguir disfrutando de la práctica del fútbol.
De más a menos
Desafortunadamente, la vuelta de Jiménez no fue de la mejor forma futbolísticamente hablando, le costó mucho trabajo adquirir la regularidad de antes, cada vez se notaba más irrelevante para Wolves, al grado de ya no contar para el equipo, teniendo que buscar su suerte en otro lado, pues estaba claro que hubo un Raúl antes y uno después de su lesión.
En Wolves, Raúl cosechó estadísticas históricas, anotando 57 goles en total, el canterano americanista logró ser el máximo goleador de Wolves en Premier League, forjándose la etiqueta de ídolo, así como llevar al equipo licántropo a competiciones europeas que desde hace varias décadas no lo conseguían, en poco tiempo Raúl se hizo de un nombre en la institución.
El calvario en selección
A la par del regreso de Jiménez a las canchas, la selección mexicana no gozaba tampoco de sus mejores tiempos; la previa al mundial de Qatar estaba llena de dudas, cuestionamientos y un pesimismo generalizado entre la afición y prensa, que eran más las quejas que la expectativa de lograr una justa mundialista no digamos histórica, sino algo decente.
De las situaciones más señaladas, fue que el seleccionador nacional de aquel entonces Gerardo “Tata” Martino, tomó decisiones que seguramente a quien esté leyendo este artículo, sigue sin entender, algo que el aficionado mexicano ha tenido que lidiar cada ciclo mundialista.
Pues el entrenador argentino optó por convocar a Jiménez, quien no gozaba de su mejor forma, con notable baja de juego y con una lesión que venía arrastrando de algún tiempo, en vez de llevar a la sensación en la delantera mexicana que también es su tocayo de apellido, Santiago Giménez.
Santi era el reflejo contario de Raúl, pues venía de fichar con el Feyenoord de Países Bajos, con un ritmo goleador notable, marcando goles y afianzándose en la titularidad en su nuevo equipo, su forma era indiscutible, algo que nadie entendía en ese momento… la historia ya la sabemos.
Ave fénix
Después de la tempestad, el camino de Jiménez apuntaba a la resiliencia, donde empezando de casi cero, teniendo clara su encomienda de regresar a un buen nivel, aparecería el Fulham, dotándole de otra oportunidad a Raúl y aunque la primera temporada fue complicada, esta segunda apunta a ser diferente; en la temporada pasada, anotó 7 goles en total, actualmente lleva 4 en este comienzo, por lo que de mantener el ritmo individual y colectivo, podría ser la temporada de redención para el que en su momento fue de los mejores delantero del fútbol inglés.
¿Y en selección?
En los pasados amistosos, Jiménez confirmó que esta enrachado, siendo el más destacado en estos encuentros, que, aunque no son parámetro para definir nivel alguno, da gusto ver al jugador haciéndose presente con goles, pero eso sí, vayamos poco a poco con Raúl con la firme esperanza de verlo regresar al gran nivel.
(Fotos: X).
Periodista deportivo 24/7, gustoso del buen fútbol y y carreras de autos, charla de todo un poco