Boxeadores amateur y profesionales compartieron cuadrilátero en la función organizada por Sparta Promotions: “Guerra Mexicana”. La velada, hecha en el interior del Palacio Municipal de Nogales, aconteció la tarde del sábado 21 de septiembre. El ánimo combativo, algo característico de los boxeadores mexicanos, se percibió en una jornada que superó las tres horas de duración. Situación a corregir de los organizadores; evitar tiempos muertos extensos entre peleas.
Víctor Pinillos, comunicador con una relación cercana hacia los cuadriláteros profesionales, fue el anunciador del evento. Las “alertas de combate” y su frase de “van a llover chingadazos” resultaron del agrado del público que llenó la zona destinada a presenciar los diez combates del cartel. Seis compromisos amateur se mostraron en la primera parte del cartel. Elementos para comenzar el intercambio de golpes: clima fresco con lluvia intensa por momentos, música de las películas de “Rocky” y realizar los protocolos básicos de operación que establecen las organizaciones profesionales de boxeo.
Luis “Galán” Pérez y Axel “Flaco” Félix empezaron la actividad. Algunas reglas del ámbito amateur: peleadores con careta, rounds de dos minutos y posibilidad de parar la pelea cuando el referí o la esquina considera que el pelador recibió un golpe contundente. Pérez se vio mejor los dos primeros asaltos pero se cansó. Axel ganó el último round. Decisión dividida en favor de Pérez.
Efrén Cabrera perdió, por decisión dividida, contra Ozziel Santiago. El primero fue al ataque pero con poca técnica, eso lo costó puntos a criterio de los jueces. Adán “Rambo” Salas demostró el origen de su apodo al encarar a Sergio Estrada. Los golpes del primero llevaron a una revisión médica por el sangrado en la boca de Estrada. Sergio tuvo buenos resultados al golpear la zona media; no obstante, la victoria fue para Salas por decisión unánime.
La pelea más complicada de puntuar –de las amateur- fue la que presentaron Gerardo Estévez y Luis “Güero” Salazar. Golpes precisos y ritmo mesurado de cada parte otorgó rounds difíciles de calificar. El asunto dio una decisión dividida más para Salazar y su esquina. La serie de decisiones concluyó con la victoria de Axel Acevedo ante Ángel Antonio. Combinaciones al rostro de Antonio mermaron su resistencia. Un jab potente al rostro hizo que el referí terminara el compromiso en el tercer episodio.
La tanda amateur concluyó con la derrota de Dylan “Chaneque” García con Ángel González. Combinaciones básicas de jab y cruzado de derecha hicieron lo suficiente para que Dylan recibiera un contero del referí. Los gritos del entrenador de García funcionaron para que el alumno lograra llegar el límite de tiempo. Triunfo unánime para González.
La Comisión de Boxeo de Orizaba, presidida por Abraham Jarquin, se instaló alrededor del cuadrilátero para ser jueces de los encuentros profesionales. Raúl “Tigre” Cortés y Luis “El Brazos” Flores combatieron en la división de peso súper welter con un límite de cuatro asaltos. Fue emotivo ver a la familia de Raúl presente a un costado del cuadrilátero. La velocidad y técnica de ambos llevó a uno de los mejores enfrentamientos del día. Criterio unánime para que el “Tigre” celebrara con su gente las tarjetas: 39-37, 40-36 y 39-37.
El grito de “¡Puro Tecamachalco!” se escuchó para alentar a Leónides Ramos. Los mensajes de aliento funcionaron al vencer a Brayan Villalobos. Si bien Ramos ganó en las tarjetas con claridad; el desarrollo de la pelea fue más reñido. Combinaciones rápidas y marcar distancia fue el plan de trabajo que le dio resultado a Ramos.
Presentar a un boxeador de la localidad hizo que la gente lograra el momento de mayor frenesí y ruido en la noche. Félix “Zurdo” Cruz –de Nogales- le hizo frente a un enemigo proveniente del puerto de Veracruz: Hammet “Crazy” Keb. Aunque la diferencia de edad era notoria, Félix salió a ganar con golpes a la zona alta y cerrando espacios. Hammet, con ese panorama, hizo un boxeo defensivo. La tendencia cambió cuando “Crazy” empezó a ejecutar golpes al rostro del enemigo que lo hicieron retroceder. Félix, aún con un ojo cerrado por los ataques, hizo un sexto –y último- episodio competitivo. El torrente de golpes que logró Hammet llevó a que se marcara un nocaut técnico. La gente aplaudió el corazón de Cruz por no abandonar pese a lo complicado del entorno.
Miembros de la Comisión de Boxeo de Río Blanco subieron al cuadrilátero para recibir una acreditación otorgada por el Consejo Mundial de Boxeo (CMB) y la Federación de Comisiones de Box Profesional de la República Mexicana (Fecombox). Esto da herramientas necesarias para seguir mostrando eventos de esta clase en la zona. La cartelera concluyó con actividad de mujeres.
Litzy “La Bomba” Adilene y Mariel “Intensa” Alcántara tuvieron un cotejo donde la potencia del golpeo fue clave. Físicos contrastantes: complexión musculosa y espigada de Adilene por el cuerpo robusto de Mariel que se trasladó desde la delegación de Iztapalapa para cerrar el evento. Los brazos largos de Adilene le dieron la ventaja necesaria para marcar distancia y golpear fuerte sin tener riesgo de ser conectada.
Mariel exhibió el ahínco de proponer pero no encontró los ángulos para una ofensiva peligrosa. Jabs al rostro derivaron en una hemorragia nasal a “Intensa” que necesitó revisión médica en un par de ocasiones. La sangre apareció al final del primer round. Un gancho de derecha impactó en la mandíbula de Alcántara y la hizo ir a la lona en el tercer round.
Ya con una enemiga lastimada, el cierre fue por nocaut técnico cuando un jab entró de lleno al rostro de Mariel al sonar la campana para concluir el tercer round. Cierre dramático por la cantidad de castigo que soportó Mariel. Noche de emociones donde se vio parte del talento formado en tierra veracruzana. La gente que acude a las funciones aprecia calidad y esto es propicio para seguir organizando noches de pugilismo.
Periodista formado en la teoría y práctica. Disfruta desde un evento de lucha libre en la calle hasta un partido de Champions.
Contacto: salroc19@gmail.com