El mexicano ha iniciado un cuarto de milenio de carreras en la Fórmula 1, convirtiéndose en apenas el décimo primer piloto en lograrlo, sin embargo, no ha sido el fin de semana especial que Sergio Pérez se imaginaba para celebrar este hito.
Desde el viernes se veían problemas para Red Bull y el sábado en clasificación se confirmaron con ambos monoplazas quedando fuera del top 10 y en carrera no hubo un resurgir inesperado.
En el circuito urbano de Marina Bay siempre ha sido complicado adelantar, a menos de que se tenga un auto en condiciones muy superiores al del rival es casi una hazaña pasar a otro piloto, ese sería el resumen de la carrera para ambos Red Bull.
Max Verstappen logró avanzar en la primera mitad hasta la segunda posición tras un auto de seguridad por un choque del Williams de Logan Sargeant pero rápidamente cayó hasta el séptimo puesto, parando a cambiar neumáticos y finalmente remontando nuevamente hasta la quinta posición y viendo terminada su racha de podios y victorias histórica.
La fiesta que no pudo ser
Por su parte, Sergio Pérez tuvo un roce con el Alpha Tauri (equipo hermano de Red Bull) de Yuki Tsunoda, a partir de ahí el mexicano solamente logró avanzar cuando todos pararon en el auto de seguridad y defendiendo todo lo que podía para retrasar su caída en la tabla de posiciones.
Tras la parada en pits, ‘Checo’ únicamente pudo recuperar hasta la octava posición, sumando apenas 4 puntos en un fin de semana que se imaginaba muy diferente el piloto mexicano.
Sin Red Bull la vida es diferente
Por primera vez en la temporada Red Bull no ganó una carrera y se demostró que fuera de la escudería austriaca y su nivel exhorbitante, la igualdad en la categoría es máxima y la batalla por la victoria tiene mucha emoción.
Mercedes optó por una estrategia súper agresiva, parando por neumáticos medios nuevos en el coche de seguridad virtual a 20 vueltas del final por abandono de Esteban Ocon.
Este movimiento permitió que las últimas 5 vueltas fueran un extasis entre los dos Mercedes, Lando Norris y Carlos Sainz, batallando todos en cada curva y recta por ser el primero en ganar fuera de los Red Bull esta temporada y provocando que a media vuelta del final George Russell se estrellara y quedara fuera Justo cuando saboreaba la victoria.
Finalmente la victoria fue in extremis para el Ferrari de Carlos Sainz, quien logró su primer Grand-Chelem (Pole, victoria y líder en todas las vueltas) en su carrera.
El podio finalmente fue para Sainz, Norris y Hamilton, que además se adjudicó la vuelta rápida, sumando grandes puntos en la búsqueda de terminar sub campeón del mundo.
Los puntos fuera del podio fueron para Leclerc, Verstappen, Gasly, Piastri, Pérez, Lawson y Magnussen.
Siguiente parada, el mítico circuito de Suzuka en Japón la siguiente semana.
(Fotos vía ‘X’ / Nota cortesía Daniel Torres)
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