El 8 de noviembre de 2019 Veracruz era goleado 5-0 en el «Pirata» de la Fuente por América, en la penúltima jornada del torneo. Nadie lo sabía, pero era el último encuentro como local de esa franquicia antes de su desafiliación.
Una jornada después, el 23 de noviembre del mismo año, Chivas recibió al Tiburón en lo que fue su último juego antes de desaparecer.
Fue un equipo que así como ganó la Copa MX del Clausura 2016, también es recordado por los adeudos con sus jugadores, las goleadas de escándalo y el récord de 41 partidos sin ganar, la peor marca en la historia de la Liga MX y el segundo peor registro del futbol mundial a nivel profesional.
La desafiliación
El 4 de diciembre de 2019, el Comité Ejecutivo de la Federación Mexicana de Futbol se reunió para votar por la desafiliación.
Eso incluyó a todas las divisiones menores y categorías que formaban parta de la Promotora Deportiva del Valle de Orizaba (Albinegros de Segunda y Tercera División).
La actualidad
Al momento de la publicación de esta nota, Fidel Kuri Grajales, expropietario de los Tiburones Rojos del Veracruz, se encuentra en el penal de Santiaguito de Almoloya de Juárez (desde septiembre), debido a que fue denunciado por la Arrendadora Internacional Azteca S.A. de C.V por fraude.
¿El regreso?
En semanas recientes, medios nacionales como ESPN y Récord han apuntado a la posibilidad de que en 2022 o 2023 los Tiburones pudieran retomar el futbol profesional.
Sería a través de Ricardo Salinas Pliego a través de su televisora TV Azteca.
Sin embargo, antes de deberá saldarse una deuda de por lo menos 200 millones de pesos ante la Federación Mexicana de Futbol.
El proyecto estaría en el interés del gobernador Cuitláhuac García Jiménez, y estaría ubicado en la Liga de Expansión.
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